EL CRONISTA

En todo relato, inicias por reconocer que lo contado no provendrá necesariamente de este mundo.  Como cronista movilizarás la realidad, impulsando los hechos históricos y revitalizando los actuales. Para eso tendrás que descubrir lo que ya sucedió, el presente y los proyectos para el futuro. Puede ser que reconozcas algo, o que ya hayas vivido o visto algo semejante, pero lo más importante de este juego es que no sólo tienes la tarea de “observador”, sino también y más interesante el papel de “creador”.

En el mundo del pensamiento -en donde el único límite es tu voluntad de imaginar- explorarás junto con personajes, mundos y un sinfín de personalidades, quienes te recordarán de alguna u otra forma emociones íntimas y personales. Como espectador encontrarás imágenes capaces de transportarte y susurrarte al oído historias que te resultarán familiares y fantásticas que producirán en ti sentimientos arcanos y visiones esotéricas. 

Verás que la tarea de ser un cronista no es fácil. El objetivo es a la vez narrar y explicar el pasado, e ir desnudando los hechos del presente. En esta crónica dependerá de tu papel de “creador” en escoger a los personajes principales de este mundo que creas, hilando los hechos conforme tu entera libertad y ánimo. Durante el proceso creativo de tu imaginación viajarás por el tiempo y por un momento tendrás la tarea de abrir puertas iniciando así el proceso más extraordinario que existe para el “SER”, el de realizar lo irrealizable, el crear de la nada y hacer magia.

Te reto a que emprendas  este viaje, y que te lances sin precaución al desafío de descubrir algo que todavía no ha sido contado… es tu turno, ahora tú eres el cronista.

Rodrigo de Ojeda